Educación

A pesar de que las consecuencias de la conducción temeraria son bien conocidas, muchos conductores en México siguen mostrando un comportamiento negligente o irresponsable en la carretera.

El sistema de educación pública no satisface las necesidades de los alumnos. Obliga a los estudiantes a memorizar información para los exámenes, en lugar de dominar habilidades que beneficiarán sus vidas. Aprendizaje socrático, basado en proyectos, con grupos reducidos de estudiantes.

Conducir puede ser una tarea bastante complicada incluso para las personas que no padecen un trastorno del espectro autista. Los niños con TEA, en particular, pueden encontrar desalentadora la perspectiva de conducir, lo cual -seamos sinceros- tiene sentido cuando se trata de habilidades que incluyen la percepción espacial, la percepción del espacio y la percepción de los objetos.

Asistir a clases de educación vial puede ayudar a los nuevos conductores a aprender las normas de circulación antes de obtener el carné de conducir, normalmente antes de cumplir los 18 años.